miércoles, 5 de diciembre de 2012

LA VIDA IMPUESTA

Podría contarte,
si acaso te encontrara,
que ya no pienso en tí,
que he cambiado para bien
y que ya nada me importas...

Que las noches en que no dormía
han pasado, como tú,
a ser parte de mi historia,
que ya no enveneno mi cuerpo
ni ahogo mi pena en fondos diamantinos...

Que hago lo que debo,
que no paso límites y me contengo,
que ya no me ahogan el amor ni el odio,
que sólo escucho música y apenas escribo
y que ya no duermo durante el día...

Podría contarte,
si acaso te encontrara,
la verdad de todo esto,
que me he visto obligada a dejar atrás
todo lo que me hacía sentir viva...

Que me muero por una copa,
que echo de menos las madrugadas
de música, opio y humo de tabaco,
que aún recuerdo el sabor de tu piel
y me tortura el recuerdo de tu risa...

Podría contarte,
si acaso te encontrara,
tantas cosas que nunca dije ni diré...
Mas aunque sé que por Destino te hallaré
no te lo contaré... Lo leerás en mi mirada...