jueves, 3 de septiembre de 2009

DESEOS OCULTOS...(Y NO TANTO)





Las nueve y media de la casi noche. Vuelvo a sentarme a tu lado en el coche y emprendemos el camino de todos los días, a un pueblo cercano a tomar algo. Te escucho, como todos los días, a medias. pienso en diversas cosas mientras hablas de las nimiedades habituales y aceleras poco a poco porque sabes que me gusta la velocidad y porque, en realidad, sabemos que un "fallo" a 150 o 160 km/h no nos daría tiempo a lamentarnos ya por nada. Yo pienso, ya más concretamente, en la noche anterior, cuando volvimos a hablar, por primera vez desde que salí del hospital, y por enésima desde que nos conocemos, en cortar nuestro leve y frágil vínculo. Y en que, como siempre, echamos marcha atrás y hacemos al día siguiente como si esa conversación no hubiera tenido lugar....








Aquella conversación fué en un bar y, rato después, estábamos hablando en el coche, aparcados casi enfrente de mi casa. Recuerdo que, por vez primera, me echaste en cara que ya no quería hacer el amor contigo... La verdad es que me sorprendiste, pues yo llevaba ya varios días en que no me encontraba muy bien: se me estaba retrasando la regla y además volvía a tener ciertos síntomas que creí haber dejado atrás durante mi famosa estancia en el hospital, la debilidad, las excesivas ganas de dormir... Decía que me sorprendiste, ya que, aunque no me encontraba en plenas facultades, sí que exageraba un poco para evitar la situación de intimidad que tú, cuando bebes demasiado, quieres tener; pero veo que tu intuición no te falló. Sabes muy bien que yo tengo que estar muy mal, realmente mal, para evitar hacer el amor. Pero hay algo que no pareces entender nunca, y es el simple hecho de que, cuando una lleva varios días discutiendo y aguantando palabras hirientes, no es que tenga el cuerpo ni mucho menos el alma para ciertas "fiestas". ¿No comprendes que no tengo un interruptor que puedo manejar a voluntad para ponerme en "hot" o en "cold"? ¿No te entra en la cabeza que, para mí no es tan fácil separar el deseo del cabreo como parece serlo para tí? No, no lo entiendes...








Sigues acelerando y por fín te has dado cuenta de que no me interesa en absoluto lo que estás diciendo, parece que por fín intuyes que lo que me ronda por la cabeza no es la maldita crisis de la que hablas todos los malditos días... por fín te callas y subes la radio porque, misteriosamente, parece que este coche te aguza la percepción y sabes siempre qué canción necesito escuchar a todo volumen... Y pienso en la noche anterior, en que por un instante contemplé la posibilidad de dejarte para siempre, librarme y liberarme de tí, de tu egoísmo, de tu falta de amor, de tu desdén, de tus deseos ocultos que no son los míos, aunque en el fondo se parezcan, porque cae la noche, y te deseo a pesar del odio y del desprecio que me tengo por haber sido cobarde y no dejarte.








Cae la noche, y ambos sabemos que, si sobrevivimos a esta eterna carretera que pasa rauda a nuestro lado, cuando todo sea oscuridad, volveremos a hacernos daño, volveremos a desearnos, volveremos a unirnos en esos fugaces instantes en que todo parece ir bien, y volveremos a estar lejos el uno del otro, aunque, en el más profundo pozo de nuestras almas, sigamos, como Cyndi Lauper, conduciendo toda la noche...

2 comentarios:

lilaNegra{AMANDA} dijo...

Bueno pues solo decirte que vine a dejarte un beso y un abrazo. Que no me gusta verte mal, pero al menos lo expresas y eso pues permite desahogarse. Solo una queja mi querida amiga. No me gusto lo de la velocidad en la carretera, despues de todo, siempre sale nuevamente el sol y si lo pensamos quizas haya inocentes que sufran sin tener culpa.

Que tal si me as una sonrisa y yo te doy dos. Que se mejoren las cosas y recuerda que hay quien te estima y quiere mucho
Lila

monah dijo...

Coincido con lila en lo de la carretera... quiero ver cómo te recuperas de esto, quiero conocerte en persona, quiero verte salir a flote... así que ni se te ocurra volver a pensar en fallos a 150 km/h, de acuerdo?

Te mando un besazo y un abrazo enorme, ya sabes que estoy aquí ;)